20
Dic
10

8 de cada 10



El paro es la principal preocupación para 8 de cada 10 españoles.


Pese a que 8 de cada 10 españoles ya percibe que estar en la Unión Europea (UE) es perjudicial para la economía, es relevante que 8 de cada 10 entienda que la clase política no es un problema


O lógico, si asumimos que quien mueve los hilos es la Banca8 de cada 10 empresas ha tenido problemas para encontrar financiación. El dinero público que va al ámbito privado no vuelve si no es con intereses leoninos.


Y 8 de cada 10 percibe que al gobierno y a la oposición  mayoritaria, sólo le preocupan los intereses de la industria cultural… Como la llamada Ley Sinde, redactada tras intensa presión desde EEUU, cuya aprobación sólo depende de las exigencias de la derecha nacionalista tras el primer rechazo, o los nuevos canales televisivos neo-conservadores.


Nada de leyes para doblegar a la Banca… pero sí para legislar el grandísimo «interés cultural general» de las retransmisiones deportivas.





Y funciona. 8 de cada 10 espectadores vimos la final España-Holanda del Campeonato Mundial de Fútbol 2010 pagado por la Sudáfrica oculta.


Casi 8 de cada 10 ciudadanos consideran que la ciencia y la tecnología tienen más beneficios que perjuicios. Pensamos que las utilizarán para nuestro bien, que el papel de la tecnología era satisfacer nuestras necesidades y deseos… Luego resulta que las máquinas se suelen utilizar para reemplazar el trabajo humano, y no repercute el alza de la productividad lograda en mejorar gratuitamente el bienestar de la gente (por no hablar de los usos policiales y militares).




8 de cada 10 personas que tienen un familiar a su cargo sufre ansiedad y estrés. Eso no lo van a arreglar las máquinas. Pero los ahorros de costes podrían orientarse a un sistema público de atención sanitaria y domiciliaria universal que mejorase la vida de ancianos y enfermos, y de sus familiares.


Ese interés no interesa. Está claro.  «Cuando el lucro es la finalidad principal de las actividades tecnológicas, caso ampliamente mayoritario, el resultado inevitable es considerar a las personas como mercaderías«.


Así que, entre la espada y la pared, justo aquellos que debían preparar la sociedad para la siguiente generación (sobre todo, los que tienen entre 45 y 54 años), se afanan por llevar al límite una obsesión que afecta a casi 8 de cada 10 españoles: perder peso.


Peso físico, para acompañar al moral, que ya anda bajo. Vacíos, pero delgados. Superficiales, pero flacos.





Y pasamos a asumir como simple anécdota que al menos 8 de cada 10 adolescentes consigue alcohol sin dificultad, o que casi 8 de de cada 10 estudiantes españoles vivan en casa de sus padres, mientras que solo 1 de cada 10 lo hace en Suecia.


Asistimos impasibles al hecho de que 8 de cada 10 españoles respira aire perjudicial para su salud, o que 8 de cada 10 productos que contienen transgénicos no lo advierten en su etiquetado.


Mucho más lejos queda demandar medidas contra la deforestación que se extiende desde Ecuador a China, y de paso, reducir la extinción de 8 de 10 cada especies, haciendo frente al mercadeo del CO2 del Banco Mundial.


Nos deja impertérritos que 8 de cada 10 áreas marinas protegidas del mundo estén mal gestionadas.


O que 8 de cada 10 personas siguen obteniendo agua de recursos contaminados.


Nos resulta ajeno que 8 de cada 10 personas del mundo sufran la explotación de corporaciones privadas, y asistimos insensibles a nuevas olas de privatizaciones.


Bonita herencia. Gran legado.





Miramos al cielo en busca redención… pero el papa y sus seguidores, fieles a su subyugante epilepsia particular, nos devuelven de bruces a la tierra, afirmando que el rock causa los males del mundo.


Aunque casi 8 de cada 10 españoles se declara católico, también 8 de cada 10 cree que, cuando una pareja no es capaz de solucionar sus problemas conyugales, el divorcio es la mejor solución. Por una vez, cuanto más lejos esté un mito metomentodo, mejor.


Como a 8 de cada 10 le gusta” que el papa visite España, se deduce que agrada su llegada, pero no para «evangelizar«, sino sólo como atracción turística… Lo perverso es que también viene como jefe del estado vaticano, al cual, el estado español regala cada año 6000 millones de euros; con la de puestos de trabajo que se crearían para acometer obras de misericordia… como la asistencia domiciliaria universal a ancianos y enfermos.





Más que el rock, el culpable del «orden criminal del mundo«, sería el rich. Se condena al rock’n’roll, pero se alaba el rich’n’ god.


La fe en dios y en los mercados.


No hay más dios que el dinero, y la Banca es su profeta.





Ahora, los mercados vienen a por el dinero del sistema público de pensiones de España.


No vienen a preparar la asistencia domiciliaria universal para los ancianos presentes y futuros.


No vienen a corregir que 8 de cada 10 mayores que viven solos no llegan a ser ni ‘mileuristas‘… dado que la pensión media contributiva es menor de 800 euros.


Ni vienen a derogar la congelación de las pensiones, pese a que el ahorro de 1530 millones sea equivalente a la deuda de despilfarro de las televisiones autonómicas.


Vienen a desmontarlo.


Los llamados reaganomics/liberales/neo-conservadores/pro-Globalización/neoliberales y socioliberales (como los del monopartido bicéfalo PPSOE), no creen en lo público… porque obedecen a intereses para saquear lo público desde lo privado. Todo un robo, por más que quieran revestirlo de ideología.


Quien gana es… de nuevo, la Banca.


Poco importa que la actual crisis-burbuja de la Deuda provoque que 8 de cada 10 españoles no pueda ahorrar para su futuro.


Al endurecer las condiciones para su percepción íntegra y digna, la cuantía de las pensiones se reducirá, y la gente se verá obligada a aportar en planes de pensiones privados.


Así será, por mucho que su rentabilidad ya se esté derrumbando en plena crisis. El partícipe es un cliente cautivo: no puede sacar el dinero aunque el plan vaya mal, sólo traspasarlo a otro que no irá mucho mejor… porque cajas y bancos lo gestionan igual (de nefasto… para el partícipe).


Pese a ello, los ministros de Trabajo siguen recomendando invertir en ellos.


Y su derrumbe no ocurre sólo en España. La situación se repite en todas partes, y más crudamente, en los países de  Lationoamérica, donde los neoliberales camparon a sus anchas.


Y el objetivo final es privatizar totalmente las pensiones públicas.


Es un plan formalizado en 1994, cuando el Banco Mundial (BM) publicó un documento sobre el «futuro de las pensiones«, de amplio calado en la UE, donde se ha conformado otro euro-puzzle, ahora de pensiones.





Ese mismo año 1994, el presidente del Fondo Monetario Internacional (FMI) visitó España para criticar su sistema público de pensiones, haciéndose acompañar en su visita por una compañía de fondos privados de pensiones, lo cual decía mucho de su «honestidad intelectual«.


Y cuando caigan las gestoras que manejarán nuestras pensiones… no veremos ni un céntimo.


Acaba de ocurrir en Holanda: el pasado septiembre, los 5 principales fondos del país (incluido ABP, cuyo patrimonio de 229.000 millones es el del mundo) anunciaron… que se ven «obligados» a recortar las pensiones prometidas a sus jubilados.


Así de sencillo.


Por cierto, en Irlanda, año y medio antes de su «rescate financiero» (eufemismo para pérdida de soberanía), los fondos de pensiones privados se habían declarado «insolventes«.


Y, previamente, en 2006, antes de la actual burbuja inmobiliaria, la quiebra de pensiones privadas afectó a EEUU por más de 600.000 millones de dólares.





La gestión privada del dinero de las pensiones públicas supone ganar un premio gordo en la lotería de las burbujas de la Deuda.


Es «para tapar agujeros»… Y, de paso, seguir lucrándose.


Por eso se crean alarmas infundadas sobre el actual sistema público de pensiones, y se realizan unas previsiones catastrofistas tan falsas como malintencionadas.


Quieren convertir un derecho en un negocio.


Qué más da que se forme otra burbuja, y cuando quiebre, el país pida otro préstamo, se malvendan sus recursos, y más de lo mismo… Otra (¿nueva?) burbuja de Deuda…. y luego, otra… y otra…




Y qué más da que, por el camino, 8 de cada 10 personas acabe viendo recortadas sus pensiones.




Pese a que 8 de cada 10 tiene momentos de introspección e interiorización, y sabe lo que es justo y lo que es injusto, nos quedamos boquiabiertos [ad]mirando de soslayo las movilizaciones francesas contra la reforma de las pensiones, ocupados como estamos en esperar, con la pueril ilusión de poder tener/mantener un trabajo, como el esclavo que aspira a recibir algún día una dádiva de su señor, y entretanto permanece tras la puerta para lo que guste.


El paro es la principal preocupación para 8 de cada 10 españoles.


4 Respuestas to “8 de cada 10”


  1. 1 Mendigo
    diciembre 22, 2010 a las 00:18

    Descubrí tu espacio hace poco, y lamento no haberlo hecho antes.

    Gracias por tus líneas.

    Un saludo!

  2. 2 José María
    diciembre 31, 2010 a las 14:19

    Apreciado Doctorsito, quería desearle un feliz y próspero año 2011.
    Agradecerle su sincero y comprometido trabajo.
    Tengo un blog donde intento transmitir mis inquietudes y puntos de vista, donde compartir mis ideas. http://amplituddemiras.blogspot.com
    De nuevo muchas gracias.

    José María Hernández Pastor

  3. 3 Javivi
    enero 13, 2011 a las 16:50

    Te felicito amigo por este blog……dá para tomarse una botellita de buen ron y así pensar y pensar todo un finde….

    abrazo fuerte Juanvi


Deja un comentario


Escribe tu dirección de correo electrónico para suscribirte a este Blog, y recibir un aviso por email con cada nuevo artículo publicado

Únete a otros 66 suscriptores