Richard Koo, economista jefe de la más grande consultora de Japón, Nomura Research Institute, y antiguo miembro del consejo de directores de la Reserva Federal (FED) de EEUU, ha visitado recientemente España, en vísperas de sus elecciones generales.
Quizá como contrapunto a la temeridad de instalar centrales nucleares en zona sísmica, Koo ha hecho gala de una proverbial sabiduría japonesa, que lamentablemente ha tenido escasa repercusión en los medios de comunicación locales.
Vino a decir que las políticas de recorte no funcionan, aportando el ejemplo de su país, Japón, donde se vivió una crisis similar a la actual.
En los años 80‘, Japón padeció una extraordinaria burbuja inmobiliaria… Y el estallido de aquella burbuja sumió al país en un período de estancamiento económico pero con inflación… Una “estanflación” al mejor estilo Volcker.
Koo ha estudiado a fondo la llamada “ushinawareta jūnen“, la década perdida japonesa.
Hay un juego de palabras entre “jūnen” (década) y “yume” (esperanza).
Koo avisa, no es traidor…
España, como EEUU, y como antes Japón, sufre un tipo de recesión que ocurre cada 50 ó 70 años por el estallido de una burbuja especulativa nacional.
Ya pasó en 1929… Cuando se produce una recesión de este tipo, familias y empresas sólo piensan en ahorrar y reducir sus deudas. Nadie pide prestado, y nadie presta, porque no se fía. La economía no responde a la bajada de tipos de interés, ni aunque lleguen a casi el cero.
Koo es claro:“La política monetaria es la primera víctima: pierde efectividad, la economía se reduce y se reduce, y la única manera de frenar la recesión es que el Estado tome prestado dinero y lo inyecte de nuevo en el sistema”.
Justo lo contrario de lo que se propugna en Europa.
Cada vez que Japón puso por delante la reducción del déficit, la economía volvió a recaer, y eso es exactamente lo mismo está ocurriendo en España… con el agravante de que España tiene mucho más paro y es mucho menos industrial que Japón.
En base a la experiencia de Japón, ¿cuánto puede durar esta crisis?
Koo responde: “Si el gobierno intenta recortar el déficit presupuestario cuando el sector privado aún se está desendeudando, que es el error que Japón cometió en 1997, entonces la recesión se alarga al 5 años más, por lo menos…”
La “década perdida” japonesa no duró 10 años, sino 15… al menos, porque hay quien sostiene que, 2 décadas después, aún no se vislumbra el final del estancamiento.
El problema es que España pertenece al euro (no al revés), y eso, como vimos, penaliza la capacidad del Estado para endeudarse y tirar de la economía, a diferencia de lo que ocurre en Japón, en EEUU ó Gran Bretaña.
La Unión Europea (UE) dice esperar que las medidas de ajuste conseguirán que los países se recuperen.
No es verdad.
Y no hace falta remitirse al caso de Japón, para demostrarlo:
- Grecia recibió un préstamo de 110.000 millones de euros inicial, seguido de otro comprometido por 109.000 millones, a cambio de recortes en salarios y gastos, y aún así, el déficit ha empeorado un 15%. El objetivo inicial de déficit de 17.000 millones para todo el 2011 se ha tenido que aumentar hasta 22.000 millones…hasta la próxima revisión.
- En Portugal, las medidas de ajuste por los 78.000 millones recibidos también fracasaron: se consiguió reducir el déficit en 2.200 millones y el gobierno declaró que “estaba sentando un ejemplo recortando gasto en la Administración”… Pero 6 meses después, el gobierno anunciaba un déficit extra del 1,1%, una reducción en los pedidos de sus fábricas del 16% y un aumento de las necesidades de las entidades al Banco Central Europeo(BCE) del 17%.
- Irlanda recibió un préstamo de 85.000 millones de euros, y pese a sus fuertes exportaciones hacia EEUU y Gran Bretaña, se estima (optimistamente) que su PIB crecerá en 2012 un ridículo 1,1%… Y eso que han reducido el coste laboral medio de cada trabajador un 5%… Toda una “devaluación interna“.
- En la España que ha visitado Koo, el crecimiento del PIB ronda el 0%, y se han perdido 326.000 empleos tras la reforma laboral de hace un año, el paro ronda los 5 millones, la crisis del débil tejido industrial se agrava… Y es firme candidata para un “rescate“.
Los políticos achacan los problemas económicos a la gran deuda pública.
Pero las cifras lo desmienten.
La deuda pública es muy inferior a la deuda privada contraída por Bancos, empresas y ciudadanos.
Pero todavía no hay ningún Rafael Correa entre los políticos, que, desde el poder, anteponga el patrimonio público a los intereses de la Banca privada.
Los países “rescatados“, fueron, más bien, “entregados” a un futuro incierto por castas socio-liberales y neo-liberales que se alternan en los sucesivos mandatos.
Y, en el caso de España, los “guardianes del statu quo capitalista” gobiernan, tanto a nivel estatal (PPSOE) como autonómico (CiU, EAJ-PNV, CC), explotando el miedo y ocultando la realidad de las cifras.
“El euro fue mal diseñado”, dice Richard Koo.
Eso es ser muy magnánimo… como poco.
En realidad, este euro era una trampa, a sabiendas de ser inviable para algunos países…
De hecho, ya lo advirtieron, en febrero de 1998, nada menos que 155 (sí… ciento cincuenta y cinco) economistas alemanes, al afirmar que este euro llevaría a la ruina a Grecia, Portugal... y España, entre otros.
Este euro fue un diseño deliberado… Un engaño con himno y bandera.
Y sólo así se explica cuán lamentable es que la UE se tenga que financiar al tipo de interés que la Banca impone, mientras que EEUU lo hace gratis a través de la Reserva Federal (FED).
O que los “mercados” ataquen, no a uno ni a dos, sino a 12 de los 17 países que componen la Zona Euro.
La Banca quiere enriquecerse a costa de lo público, para que no peligre lo que ya posee en privado.
Es una vergüenza tener los medios para solucionar la crisis y no usarlos… salvo que en realidad se trate de subyugar a los países utilizando el libro de estilo del FMI…
Porque, cómo no… En efecto, el FMI ha participado en los rescates financieros de los países europeos a través del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (EFSF), e incluso se plantea el rescate directo… ¡ subvencionado por el propio BCE !.
Y la tragedia griega de países latinoamericanos como Ecuador y Argentina, podría repetirse por toda Europa.
Koo vino a recordar dónde, con este sistema, iremos a parar.
A un “harakiri” global.
Los políticos que defienden las medidas de ajuste y los recortes sociales, con la excusa de luchar contra el déficit público, están sirviendo a la Banca, no al pueblo.
No les votes… ¡ Bótales !