Los trabajadores sólo ven ajustes en sus condiciones de vida y trabajo.
El gobierno español, previa consulta a las Cortes, acaba de aprobar varios ajustes para reducir el déficit público, que afectan a la inversión pública, al sueldo de los funcionarios, las pensiones, la edad de jubilación, los medicamentos, la dependencia de los ancianos, la ayuda al desarrollo…
El objetivo, ahorrar 15.000 millones de euros adicionales, de aquí a 2011, para devolver el déficit al límite del 3% fijado por el Tratado de Maastrich de la Unión Europea (UE) antes de 2013.
A estos, hay que añadir los ajustes anunciados a finales de 2009 (la subida de los tipos impositivos sobre las ganancias de capital y del IVA), y la actual aunque encubierta subida de los impuestos sobre la gasolina.
Y sumar la parte correspondiente a los 750.000 millones de euros que la UE ha destinado a la banca.
Faltan por llegar la reforma laboral y la reducción de las prestaciones por desempleo solicitadas por el gobernador del Banco de España y también por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Pese al gesto del gobierno con la aprobación de la prestación de desempleo para el colectivo de trabajadores autónomos, la clase trabajadora percibe estos ajustes como un ataque contra sus derechos sociales, demandando medidas más justas, progresivas y redistributivas, como:
- subida del IRPF para las rentas más altas
- reimplantación del impuesto de patrimonio
- nacionalización de la banca (especialmente, las cajas de ahorro) para que el crédito llegue a las empresas y a las familias, y con un coste razonable
- rebaja de sueldos de cargos públicos
- cuestionamiento de sueldos y pensiones vitalicios de ex-cargos públicos
- control de las TV’s públicas estatales (deuda acumulada de 3100 millones, más otros 8000 millones condonados por el Estado en 2007) y autonómicas (pérdidas de 1000 millones cada año)
- sustanciales recortes en Defensa y sus misiones militares
- finalizar la ayudas a las religiones, y la exención de que paguen el IBI
- lucha contra el fraude fiscal y la economía sumergida
- un más sustancial ahorro en la asignación a la Casa Real
- reducir el conglomerado de sociedades mercantiles, fundaciones, consorcios, agencias y otras entidades que, pese a ser creados por el Estado y las Autonomías, esquivan el control del gasto público
- reducir el número de asesores de los cargos estatales y autonómicos
- recorte de subvenciones de toda índole
- campaña de recogida de firmas para que se cambie el color a los billetes de 500 euros, y así sacar a la luz los 108 millones de billetes de 500 euros que existen en España (lo que supone 54000 millones de euros), con el fin de que los defraudadores no se salgan con la suya, y paguen lo que les corresponde, puesto que España tiene un PIB que supone el 13% del PIB de la Eurozona, pero, sin embargo, posee el 26.6% de los billetes de 500 euros circulantes en la misma
- una variante de la opción anterior, es eliminar los billetes de 500 euros. De hecho, en Reino unido, ya no se suministran, porque han constatado que el 90% de la demanda de estos billetes se realiza para actividades criminales
Los ajustes no sólo tienen lugar en España, cuyo Estado del Bienestar, si de la clase trabajadora se trata, está tan poco desarrollado, que se sitúa a la cola de Europa…
En toda Europa se están tomando medidas similares que afectan, incluso, a los trabajadores de los estados «motores» de la UE.
Pero la crisis actual, ¿ no provenía de una burbuja de crédito, sobre todo, inmobiliario ?
Eso nos han dicho… Parece que:
- A las entidades financieras, y en contra de la más elemental y arraigada práctica bancaria, no se les ocurrió otra cosa que conceder créditos sabiendo, de antemano, que no podían pagarlos, y exponiéndose voluntariamente a la quiebra.
- Entretanto, se podría pensar que los gobiernos y los reguladores no sabían nada, denotando que todos eran/son unos inútiles e incapaces. Entre ellos el Banco Central Europeo (BCE), que no tenía otra cosa mejor que hacer que bajar los tipos, y fomentar una burbuja para financiar los excesos de Grecia, Portugal o España…
- Se podría deducir que ninguno de ellos había estudiado las crisis anteriores.
Pero nada de eso tiene sentido. Respetando todas las opiniones, ni los expertos independientes (no sujetos a ataduras de intereses), ni la Historia, corroboran esa versión.
La Historia muestra que, antes de la surgida en 2008, ha habido multitud de crisis, todas relacionadas con la contracción del crédito; es decir, los bancos han dejado de prestar y han querido cobrar.
Por citar algunas, en 1857 y en 1929, y más recientemente, en 1973, 1990 y 2000, más las innumerables locales en las que ha intervenido el Fondo Monetario Internacional (FMI), más las de materias primas…
El dinero, de natural, inquieto, cambia de titulares hasta llegar, en forma de depósito, a los Bancos. Éstos, a su vez, sólo necesitan mantener una pequeña parte de sus depósitos, entre nada y el 10%, como reservas en sus respectivas cuentas, para garantizar sus obligaciones frente a sus depositantes. A cambio, pueden prestar e invertir hasta 9 veces las reservas, 10 veces los depósitos iniciales.
Es decir, los Bancos crean dinero, expanden el crédito en base a depósitos que no tienen, y cobran intereses por un dinero que no existe y que se multiplica, como «los panes y peces», gracias a este sistema, técnicamente llamado sistema monetario de reserva fraccional, exportado por la Reserva Federal (FED) de EEUU, desde 1913, como ya vimos, al resto del mundo.
En dos años, el saldo bruto de la Deuda externa ha crecido un 55% en España, casi el 50% en Francia, 42% en Alemania, un 31% en Reino Unido, el 27% en EEUU y un meritorio 95% en Rusia… Y, observando la progresión de la Deuda norteamericana entre 1950 y 1999, con la de los últimos 8 años, se comprueba el trabajo a destajo de las imprentas monetarias.
La particularidad de la crisis de 2008 es que los Bancos no sólo habrían contraído el crédito y buscado cobrar, sino que además obtuvieron ganancias extra, gracias a poder y haber apostado a que ello provocaría una crisis.
El por qué de las crisis
Las crisis se planifican, son racionales y premeditadas.
Y en ellas, siempre hay alguien que sale beneficiado, y siempre son los mismos: la Banca y su élite financiera. En la crisis actual, el FMI, como brazo armado de EEUU, juega un papel clave, intentando confundir a la opinión pública, permitiendo y no denunciando el origen verdadero, la génesis de la creación de las crisis.
Antiguamente las guerras se libraban en los campos de batalla. Hoy se libran en los despachos, planificando y tomando las medidas que hace 2.500 años escribía Sun Tzu.
Como resultado de unas medidas sujetas a una planificación, se destruyen empresas, estados y economías, con la misma intención que hace siete décadas ó siete siglos. Lo que ahora llamamos «mercados», siguen siendo los Bancos, y las élites en torno a ellos.
Los métodos ya no son físicamente tan violentos como entonces, pero los objetivos son los mismos.
Como explica John Perkins en su libro ”Confesiones de un Gangster Económico”, EEUU se sirve de un gangster ó francotirador económico para allanar el camino a la concesión de créditos a los países. El FMI, al igual que el Banco Mundial y otras organizaciones afines, juegan para EEUU ese mismo rol.
El país que contrae la Deuda, además del pago de intereses, se ve inmerso en el cumplimiento de contrapartidas y obligaciones, entre las que se incluye la venta de sus activos y recursos a precio de saldo a las multinacionales que proveen de beneficios a la Banca, así como seguir políticas favorables a los países acreedores.
Como ya habíamos visto en este Blog, la Deuda es un instrumento neocolonial para facilitar el acceso externo a los múltiples recursos naturales de los países. Y si no, que le pregunten a Haití, a Irán, a Iraq, y a tantos países de Latinoamérica.
A veces, para destruir un país (o una Unión Monetaria), se necesita destruir económicamente a otro país en su lugar, o a uno que ya esté dentro de esa Unión y tenga cierto tamaño.
Por eso ni Grecia, ni Portugal, ni Islandia, ni Letonia, ni Irlanda, son casos equiparables al de España: la quiebra de la economía española significaría una ruptura del euro.
No sólo hay una partida, existen varias. La más importante es la de EEUU contra China, con la UE de por medio. EEUU puede acosar a China con el dólar y la Organización Mundial del Comercio (proteccionismo/aranceles/sanciones) pero no va a hacerlo directamente… para eso están la UE y el euro.
La guerra comercial entre EEUU y China tiene muchos frentes.
Uno de ellos es la lucha por las materias primas (ya vimos el caso del petróleo, con Rusia e Irán de por medio).
Otro es el de las monedas, y por eso es importante lo que le ocurra a España, ya que de ello depende el futuro del euro.
El gobierno español sabía que se podía endeudar, porque sabe que le compran la deuda que emite. Por eso los Presupuestos Generales del Estado han sido y son, los que han sido y son… China está comprando deuda española para atacar a EEUU y en su momento puede atacar a la propia UE, si se alinea con EEUU.
China se deshace de Deuda estadounidense, pero compra Deuda española.
¿ Por qué iba China a comprar deuda soberana española ?
Porque España tiene algo valioso que ofrecer a China en esta guerra, el derecho de “veto” sobre tres materias cruciales en la UE: política exterior, defensa y fiscalidad (sobre todo de cara a las Perspectivas Financieras 2014-2021), lo que de facto le facilitaría la capacidad de influir en decisiones claves de la política comunitaria.
Por otro lado, en Europa gusta decir que a EEUU no le interesa que la UE se revele como competidor… Una afirmación demasiado optimista, teniendo en cuenta que 21 de los 27 miembros de la UE son también miembros de la OTAN, la cual que está liderada por EEUU… Europa no ha escapado a su control desde la II Guerra Mundial, y nunca hubo la más mínima posibilidad real de ello. Eso no ha ocurrido ni va a ocurrir: la UE tiene un mero papel de súbdita de los intereses económicos de las multinacionales y, por ende, la Banca de EEUU…
Lo cual no es óbice para que a Alemania y Francia les interese la UE: ésta les sirve para sus propósitos de expansión económica, aunque haya que pactar con el diablo americano, a través de los recientes fondos de rescate (bancario, realmente) del FMI. Y de ahí la ampliación constante de la UE hacia los países del Este de Europa: nuevos mercados y mano de obra barata, sin mirar atrás, en una suerte de «política de tierra quemada«, propia de la Globalización.
Francia y Alemania también participan en el juego de la Deuda. Y, como si no tuviesen bastante con tener los bancos más solventes del mundo, tienen colocados a varios de sus Bancos entre los Primary Dealers (PD) de la Deuda española… Los PD son los compradores preferentes… los que, en cada subasta que hace el Tesoro, tienen ventaja a la hora de realizar peticiones, derecho de elegir qué comprar, cuánto comprar, cómo comprar… antes que cualquier fondo.
No nos extrañe, pues, ver cómo toman posiciones estratégicas en cada sector, p.ej. en el sector agroalimentario, en la gran distribución comercial, en el sector de automoción…
La implantación de las empresas francesas y alemanas en España es tal, que mantienen el 23,5% de la cuota de mercado y controlan el 10% del PIB español.
La hegemonía del capital extranjero en España, no es sino neocolonialismo, especialmente por la dependencia del capital y relevancia de EEUU, Alemania, Francia y Reino Unido, en los sectores más importantes de la economía.
EEUU y China saben que España es el sitio indicado para «hacérselas pasar canutas» a la UE.
En China lo que sobran son dólares. Por eso, y dentro de la guerra de China contra EEUU, cada lado desestabiliza lo que puede. En el caso chino, por ejemplo, comprando Deuda soberana española. ¿ Por qué, si no, iba a estar China interesada en comprar tanta Deuda española?
España podría jugar a dos barajas, e incluso «venderse» a China, como mejor postor, pero, como contrapunto, ya están Alemania y Francia empujando a la UE para que la alianza sea con EEUU, a través del FMI, y del Tratado de Libre Comercio (TLC), a cambio de su expansión al Este…
¿ A quién sirve el euro ?
El euro NO disciplina a los países.
Muchos países, hasta los motores de la construcción europea, han incumplido las condiciones de Maastricht entre 2002 y 2005.
Las cuentas estaban sobre la mesa desde 1991 con múltiples informes, hasta de economistas y profesores alemanes que explicaron lo que pasaría, pero, aún así, se optó por ESTE euro, pese a ser, no sólo inviable, sino sus condiciones imposibles de cumplir matemáticamente.
EEUU lo sabía, pero como le interesaba expandir su dominio, lo permitió.
Alemania y Francia, lo sabían, pero encajaba con su estrategia de producir y vender, y siguieron adelante.
Y las élites del resto de países, se frotaron las manos, y aceptaron.
Élites como las de de España, donde, a finales del año 2006:
- 20 familias eran propietarias del 20,14% del capital de las empresas del IBEX-35.
- 1.440 personas controlaban una cantidad de recursos que equivalía al 80,5% del PIB español.
En 2010, nada ha cambiado: un selecto grupo de 20 familias y empresarios controlan cerca del 37,1% del IBEX.
Son élites que, como las dinastías del poder de Grecia, han esquilmado a sus países para enriquecerse, a costa del sufrimiento de la inmensa mayoría de la población, y de la pesada carga que dejan a las generaciones futuras, todo para asegurar que su dominio actual se perpetúa.
Élites que se rodean de un aparato de medios de comunicación para crear opinión favorable a sus intereses, revestidos del más escandaloso patrioterío.
Porque, quien controla la Deuda, controla a los individuos.
Poco importa el coste interno: cuando un país se hace deudor, los Bancos, el FMI, el Banco Mundial y demás agentes, le imponen sus condiciones… Sí, sus archi-conocidas políticas liberales: fin de aranceles, asentamiento de inversores y empresas extranjeras, privatizaciones a precio de saldo en el sector público (luz, agua, comunicaciones, prisiones, sistemas de tratamiento, de residuos…), reducción de los salarios de los trabajadores, flexi-precariedad del empleo en el mercado de trabajo, etc etc.
Fuera del euro
El Banco Central Europeo (BCE) se diseñó para que tuviese un limitado control de actuación. No puede rescatar países (hay una cláusula que lo impide). No obliga a que los Bancos faciliten créditos a las economías locales, con lo que les permite financiarse sólo con la venta de los bonos adquiridos al BCE. No tiene control práctico sobre la base monetaria, porque no ejerce su autonomía monetaria para crear dinero: aunque el BCE crea el «primer» dinero, el circulante en sí lo crean los Bancos cuando prestan.
Al estar bajo el sistema monetario de reserva fraccional, la mayor parte del dinero en circulación lo crea la Banca con sus préstamos. Si la Banca no presta, no hay creación de dinero, ni expansión del dinero.
Y cuando, al final, interviene el FMI, al no poder imponer el BCE ajustes en el tipo de cambio ni en el interés… todo el ajuste recae sobre el empleo. Sí, es el caso de Grecia, de Portugal, de España, y podría ocurrir en cualquier otro país dentro del euro.
Ante esta perspectiva, ¿ alguien se atreve a vaticinar dónde parará la sangría del desempleo en España ?… ¿ En 5 millones de parados ?… ¿ En 6 ?… ¿ En 10 ?
Por eso, ¿no sería mejor salir del euro, realizar el ajuste usando la política monetaria y luego replantearse si volver al euro, o no, después de la recuperación de la economía?
No todo el ajuste sería sobre el empleo, y se salvarían puestos de trabajo… porque, cuando no se puede devaluar la moneda, se devalúan el empleo y los salarios.
La economía española sólo tiene dos opciones:
a) Seguir dentro de la Unión Monetaria y del Euro: a falta de política monetaria, el ajuste sólo podrá continuar vía desempleo. Confiar solamente en la política fiscal para salir de la crisis es utópico. La mejora en las tasas de ahorro de las familias es positiva, pero insuficiente. Quedaría como alternativa una depreciación interna sui-generis vía precios y salarios, que, a todas luces, parece imposible que ocurra.
b) Salida de la Unión Monetaria y del Euro: recuperación de la política monetaria, devaluación, recuperación de la producción y del mercado interior, recuperación de la competitividad perdida.
Cuidado, no será más sencilla que la anterior. Pero sólo nosotros nos podemos ayudar, porque sólo nosotros nos queremos ayudar… gratis.
Y, llegados a este punto, si se pone difícil…
- La deuda se renegocia, y si es injusta y onerosa, se deja de pagar
- Ante la quiebra de bancos, nacionalización
- Ante la fuga de capitales, incautación de propiedades
- Ante el control de los sectores económicos nacionales por multinacionales extranjeras, recuperación mediante copropiedad (y el dinero, en cuentas nacionales)
- Nuevos tratados, bilaterales, de comercio justo… los que nos interesen: nada de trangénicos.
- Salida de la OTAN
Las consecuencias serían problemáticas a corto plazo, pero la permanencia en ESTE euro, es inviable.
No sólo es factible. También es posible que un país miembro abandone el euro.
Los Tratados de la Unión no establecen ninguna restricción a la salida de un país.
Fuera de la Unión Europea
La UE ha destruido el tejido productivo de la agricultura, la industria y los servicios de los países europeos, para importar productos y manufacturas del exterior (sí… como no… mucho, de China), externalizando el empleo local, degradando el medio ambiente y extendiendo la pobreza de las «neocolonias» a las que se explota, a nivel mundial.
La UE es un vehículo para la Globalización del sistema financiero… pero, qué curioso, carece de una armonización fiscal, lo que hace legal la existencia de paraísos fiscales en su seno (el más relevante, Luxemburgo, que no es un país, sino un «canalizador» de inversiones), que evitan que se pueda perseguir la responsabilidad fiscal de las oligarquías financieras locales.
España ya ha cumplido su papel en el euro: mano de obra barata y mercado grande (40 millones de habitantes) para productos alemanes, franceses, holandeses… Es el papel que la asignaron, muy distinto del que vendieron los políticos (salvo Julio Anguita) a la opinión pública.
Pero, por cada euro entregado por la UE a España en forma de Fondos de Cohesión, las multinacionales de Alemania y Francia se han llevado 4,5 de España.
El modelo es siempre es mismo: integrar a muchos países para seguir creciendo, y seguir creciendo y seguir creciendo… «Sangre fresca para los vampiros«.
Para los que mandan (Alemania y Francia), que otros países entren es condición obligatoria para que el sistema continúe funcionando, o de lo contrario, se colapsaría.
Es bastante simple: dentro de cualquier Unión Monetaria, para que un país tenga superávit comercial, otros países deben ser deficitarios. Los países excedentarios ya estaban claros, por tanto, se necesitaban (y necesitan) países deficitarios.
A cambio, se les permite tener la Presidencia de la UE cada cierto tiempo.
España ya no interesa, los mercados están en el Este: mano de obra barata y nuevos mercados abiertos para los productos de aquellos a los que sí les interesa estar en el euro.
El problema ahora no es si nos echarán del euro, o nos dejarán quedarnos… es si nos interesa estar.
Que nadie espere sacrificios de Alemania ni de Francia… Nada es gratis.
Y, en lo que a la clase trabajadora toca, la UE, ni está, ni se la espera.
Así que, no tiene sentido permanecer en ella.
Fuera de la Deuda
La solución al problema de la Deuda es que el Tesoro emita sus propios billetes.
Poniendo el caso de EEUU, por ser el iniciador del proceso, ya que emite dólares al mundo desde la Reserva Federal (FED):
a) El Tesoro recompra su deuda en el mercado y la paga con la emisión de dólares, con lo que se ahorra pagarle a la FED los 43 billones de dólares de intereses, porque, en este caso, el Tesoro estará creando moneda sin crear intereses, y por tanto, sin crear inflación.
b) Una parte del dinero que reciban los tenedores de bonos se deposita en los Bancos, que de esta forma se recapitalizan y sanean sus balances, y el resto se consume, con lo que se reactiva la economía.
c) Una vez que no existan bonos en el mercado, se prohíbe el sistema monetario de reserva fraccional, se eliminan las funciones de los Bancos Centrales, y los Bancos vuelven a prestar por las cantidades de depósitos que tengan. Es el fin de la creación de dinero sin respaldo.
d) La oferta monetaria, creada por el Tesoro, no por la FED, sólo aumenta una tasa preestablecida (el 4% ó el 5%) de acuerdo con la tasa de aumento de la población, y se hace pública a través de los Presupuestos Generales del Estado.
e) En el caso de que los bancos no quisieran prestar, sería el Tesoro quien prestaría directamente a empresas y ciudadanos.
Con este sistema, no habría deuda pública. Sería cero. Nada de bonos.
Se podría aplicar en cada país.
Eso sí: habríamos pasado de emisión controlada por manos privadas, a emisión controlada por manos públicas… Por eso va a ser difícil que se adopte: porque va en contra de los intereses privados de la Globalización bancaria.
Y, como todas las depresiones financieras de importancia tienen su raiz en la manipulación de la oferta monetaria, sin tal manipulación, no habría depresiones. De modo que el FMI sobraría.
Fin de las crisis actual y futuras.
Y, un primer paso, para luego adoptar soluciones de futuro.
Pero, si no cambiamos de sistema, ya sabemos lo que nos espera…
Los ajustes de corte neoliberal
Porque los neoliberales sólo quieren ir hablar de lo público si es para apropiarse de ello, pasándolo a (sus) manos privadas.
Durante al menos dos años los estados bálticos de Lituania, Letonia y Estonia han recurrido reiteradamente a la aplicación de ajustes y medidas draconianas, recortando severamente el gasto público y aumentando los impuestos para tratar de salir del agujero por sí mismos.
Lituania se apretó el cinturón de un modo tan brutal, que provocó que su PIB disminuyera un 17% . Letonia y Estonia han sufrido caídas parecidas.
De esta forma, lo que han conseguido estos países ha sido recortar salvajemente el empleo y los salarios (primero los del sector público, y luego, por imitación y difusión, los del ámbito privado), y sufrir una fiscalidad injusta, no progresiva, para acabar hundiéndose en la pobreza, en lugar de conseguir acercarse a los niveles de prosperidad de la Europa Occidental que les prometieron cuando se independizaron de Rusia en 1991.
Se está transfiriendo el poder político, social, fiscal y económico a la UE, y el control financiero a la Banca internacional a través del BCE y del FMI, cuyos planes de ajuste estructural contra los trabajadores abocan a los gobiernos a liquidar el dominio público y sus recursos (económicos y naturales), y a comprometerse a aplicar medidas para pagar los intereses de la Deuda que han tenido que contraer.
Así avanza la Globalización, apropiándose totalmente de la soberanía y bienestar populares, hasta que el proceso de esclavización culmine en un Nuevo Orden Mundial, una unidad de poder en lo financiero, que nos quieren vender utilizando palabras nobles como cooperación, ecología, crisis y «revolución imparable», para engañarnos, porque realmente se trata de un saqueo a nivel global por parte de la Banca y sus adláteres.
Esa «revolución imparable», no es tal… Y es «parable«.
No será fácil, ellos tienen muchos medios, y nosotros, muchos miedos.
Pero contamos con el ánimo de la gente que intenta sobreponerse y ganar la lucha de cada día, y con muchos y buenos ejemplos de otros, que consiguieron vencer grandes batallas. Ejemplos reales: Gandhi, Luther King, Vicente Ferrer…
Podemos boicotear esta Europa de vodevil.
Y aplicarnos la copla en casa.
Gobiernos
Hemos de tener claro que los gobiernos de los países europeos, de todo signo y color, en ésta o en pasadas legislaturas, han sido y son instrumentos de la Banca, desde el momento en que sus partidos tienen que financiarse, hasta el momento en que elaboran y ejecutan unos Presupuestos, dentro de un sistema diseñado para el dominio del Dinero.
El centro-izquierda ha renunciado a los ideales de socialdemocracia, y abandera el socioliberalismo. La derecha permanece fiel al más puro liberalismo, actualizado bajo la doctrina del neoliberalismo.
Por eso, sean del signo y color que sean, aplican a la clase trabajadora ajustes, recortes, y medidas. Nos están haciendo un traje, sin bolsillos…
Por eso no baja el precio de la vivienda, y, por eso, no están quebrando los bancos en España.
Porque es probable que los bancos ya estén quebrados, y que sólo se sostengan gracias a la opacidad financiera que se les permite, por estar amparada legalmente:
- El Real Decreto-ley 10/2008, de 12 de diciembre, autorizó a las empresas, “en situación de quiebra” a seguir sus actividades con normalidad (lo cual tiene una gran repercusión en las empresas del sector inmobiliario), y el Real Decreto-ley 5/2010, de 31 de marzo, amplió la vigencia de esa medida 2 años más
- El Real Decreto-ley 6/2010, de 9 de abril, permite mantener valorado como urbano el suelo que lleve mucho tiempo sin construir; al no volver a ser rústico, se mantiene el precio del suelo.
Quieren que se lo prestemos, y también que se lo paguemos nosotros, una vez más.
Desrregular. Privatizar el beneficio. Socializar las pérdidas.
Pero se puede cambiar…
- Fuera de ESTE euro. La moneda común europea ha privado a los países de la zona euro expuestos a esta ofensiva exportadora franco-alemana, de la posibilidad de restaurar la competitividad de sus economías a través de la devaluación de sus monedas, con EEUU a la espera de recoger las intereses de más deuda emitida través del FMI, y beneficiar, de nuevo, a las élites alimentadas por la Banca.
- Fuera de ESTA Unión Europea. Casi la mitad de la deuda privada con el exterior de los bancos y empresas españolas está en manos de Alemania y Francia. Un gigantesco negocio que les permite apoderarse, vía intereses de la deuda, de hasta un 25% de la ganancia capitalista producida en España.
Han cegado la posibilidad de construir una economía independiente, nos han reducido a un país de servicios y ladrillo, sin posibilidad de competir en sectores de mayor calidad, y nos han hecho depender de la financiación exterior, por la que nos cobran intereses de usura.
Este es el saldo, para España, tras 24 años de pertenencia a la UE.
Nadie regala duros a pesetas… mientras exista el Dinero.
Lo que nos enseña la crisis de Grecia, y su probable extensión a otros países, como España, es «Dejemos que el neoliberalismo muera con el euro».
Y, en España, empecemos por reformar este sistema electoral bipartitidista (diseñado para favorecer a los partidos con intereses bancarios), por estar carente de la representatividad necesaria para poder avanzar con las reformas pro-sociales que demanda la gente que vive en él.
Si el 75% de la población española expresa que el desempleo es su principal problema, y éste ya ha alcanzado los 4,6 millones, y sigue subiendo… NO se deben realizar ajustes que lo agraven ni lo consoliden. La población NO quiere una década de estancamiento.
Y, en las urnas, ese VOTO debe poder contar, de forma que la distribución de escaños refleje la voluntad del electorado. Hasta si es en blanco, como protesta frente a un sistema injusto.
Todo esto no sale en ninguna TV… Sólo nos emiten cartas de ajuste.
Sin embargo, otro mundo es posible.
(Entrevista de Iñaki Gabilondo a Carlos Martínez, presidente de ATTAC España, en CNN+ el 27 de mayo de 2010: enlace )